Somos el Programa Nacional de Reducción de la Pobreza que tiene por objetivo aumentar los ingresos y el acceso a servicios sociales de las familias en condición de vulnerabilidad.
Coordinamos y aglutinamos las acciones de las instituciones públicas para dar respuestas simultáneas en el acceso a la alimentación, a la salud, a la educación, al agua potable, a una vivienda segura y confortable, al trabajo y a nuevas y mejores oportunidades de ingresos para las familias más vulnerables de Paraguay.
Elementos principales del programa
1) Enfoque de precisión: identificamos claramente a las familias que viven en condición de pobreza y pobreza extrema. Mediante la aplicación de una Ficha Social se determina la situación socioeconómica de las familias; dónde y cómo viven; qué nivel educativo tienen; cuáles son sus medios de vida y qué oportunidades tienen. Los datos, georreferenciados, permiten principalmente, concretar acciones más eficientes frente a la multidimencionalidad de la pobreza. La meta al 2018 es llegar a 300.000 familias vulnerables identificadas y apoyadas.
2) Centralidad de la inclusión productiva: articulamos iniciativas que tienen como propósito el crecimiento económico y productivo de las familias vulnerables. Las familias con vocación agropecuaria reciben asistencia técnica continua para diversificar y modernizar sus fincas con tecnología para la producción agrícola, ganadera y forestal. El programa pone el acento en vincular la producción a cadenas de valor públicas o privadas con contratos formales por cosecha, maximizando el uso de los activos productivos de las familias en vulnerabilidad. También implementa el Decreto 3000, que posibilita a las instituciones la realización de compras de productos originados en la agricultura familiar.
Para la generación del ingreso rural no agropecuario, se ponen en marcha obras públicas pequeñas y medianas, tales como construcción de puentes, caminos y viviendas, vinculadas a mano de obra local que recibe capacitación en oficios.
3) Conexión con servicios sociales eficientes: el enfoque integral permite fortalecer las acciones tendientes a la protección de los derechos de niños y niñas, a su acceso y permanencia en el sistema educativo y la atención a la salud en sus mismas comunidades con una visión preventiva. Ponemos énfasis además en los servicios sociales para personas con discapacidad y adultos mayores.
Nuestros programas actúan coordinadamente para que las comunidades accedan a derechos fundamentales como educación, salud, agua y saneamiento, vivienda digna, y los beneficiarios cuenten con documentos de identidad.
4) Enfoque territorial integral social, económico y ambiental: nuestra estrategia parte de un análisis de la demanda y la oferta pública presente en los territorios, además de sus dinámicas y actores sociales y económicos.
Esta visión permite invertir estratégicamente en obras viales, mejorar la distribución de los servicios de salud, identificar y mejorar la eficiencia del gasto público al dar integralidad a la oferta pública y potenciar económicamente los territorios para mejorar las oportunidades de la población.
5) Monitoreo efectivo, con tecnología de avanzada: poseemos un sistema de monitoreo encargado de alimentar una plataforma digital que permite visualizar acciones en los asentamientos priorizados, seleccionados por su ubicación geográfica. El sistema, denominado “Tablero de control presidencial”, recopila las acciones de 15 instituciones participantes, donde 200 usuarios cargan y mantienen la información actualizada sobre las labores.
6) Cambio actitudinal hacia la pro-actividad para el desarrollo: acompañamos a las familias animándolas a mejorar su participación social, económica y cultural para el desarrollo de capacidades personales, familiares y comunitarias que les permitan emerger de la pobreza.
Mediante el programa AROVIA PARAGUAY, las comunidades reciben a jóvenes profesionales voluntarios, quienes acompañan a las familias en esta dinámica y además articulan y coordinan la oferta y la demanda pública en favor de las comunidades.
7) Gestión efectiva de redes inter-institucionales, del sector público y privado: la articulación intersectorial e interinstitucional es una de las fortalezas del programa. Semanalmente, 18 instituciones del sector público se reúnen bajo la coordinación de la STP para dar seguimiento al avance de las acciones y a las decisiones tomadas sobre la política social en reuniones quincenales del Equipo Ejecutivo del Gabinete Social.
Así también, miembros del Gabinete Social participan e integran el equipo económico nacional para asegurar que las políticas implementadas tengan una visión integral. Todo el trabajo de Sembrando Oportunidades es ejecutado en alianza con los gobiernos departamentales y municipales.
La STP encamina otros espacios de articulación con la sociedad civil en reuniones mensuales de coordinación con la cooperación internacional. Impulsa y acompaña al Equipo Nacional de Estrategia País (ENEP) y participa del Grupo impulsor del Índice de Progreso Social y del Grupo impulsor privado del desarrollo en asentamientos priorizados.