“Se cumplió 60 años de relaciones diplomáticas entre Paraguay y la República de China (Taiwán) y los habitantes de ambos países debemos sentirnos orgullosos de nuestros antepasados, de nuestra historia en común, y de los logros obtenidos a lo largo de estos años de cooperación y alianza para el desarrollo de nuestros pueblos”, destacó Carlos Fleitas, Máster en Relaciones Internacionales y Máster en Asuntos Asiáticos, y ex encargado de negocios de la Embajada paraguaya en Taiwán.
Al referirse al inicio de las relaciones entre ambos países, que data del 12 de julio de 1957, recordó que cuando las Cancillerías de la República del Paraguay y la República de China (Taiwán) comienzan sus relaciones diplomáticas. “En ese momento, no se imaginó el gran impacto que la misma iba a tener en el devenir de la historia de ambos pueblos, separados geográficamente, pero unidos por el deseo de progreso y desarrollo”, agregó.
En ese contexto, añadió Fleitas que ambos Gobiernos desarrollaron puntos de convergencia en torno a ideales buscando un destino común a través de una Política de Cooperación para el Desarrollo que asegure el bienestar y prosperidad de sus respectivas naciones.
También en ese sentido, significó el Embajador Fleitas que “tanto nuestro país como China (Taiwán) han analizado y entendido que la paz, la protección de la naturaleza, el fomento de los derechos humanos y libertades democráticas, formación académica de sus habitantes, así como su bienestar material, no son fenómenos aislados que puedan ser analizados y abordados independientemente. Están muy relacionados a todos los niveles y necesitan ser tratados desde esa óptica, desarrollando así una sinergia para buscar el desarrollo sostenido de sus respectivas sociedades, donde el deseo común de bienestar para sus sociedades, constituye la llave para el logro de los resultados alcanzados hasta la fecha”.
Fleitas remarcó que “varias cosas nos unen a ambas naciones. Las banderas nacionales tienen los mismos colores, aunque con significados diferentes. En este sentido, el emblema patrio de la República China simbolizan los 3 Principios del Pueblo propugnados por Sun Yat Sen: El blanco representa la democracia y la igualdad, el azul representa el nacionalismo cívico y la libertad, el rojo representa el bienestar del pueblo y la fraternidad. El sol de color blanco simboliza el espíritu de progreso y sus 12 rayos representan las 12 horas tradicionales chinas del día.
Mientras en la nuestra – expresó- el color rojo simboliza la justicia, el blanco la paz y el azul la libertad.
Ambos países –dijo igualmente- hemos tenido cruentas guerras: la República de China (Taiwán) durante la guerra con el Japón y nosotros durante la Guerra de la Triple Alianza y del Chaco Boreal, donde se destacó el valor y heroísmo en defensa de la integridad territorial.
En la actualidad, se hallan estudiando en la nación asiática más de 120 jóvenes compatriotas cursando carreras universitarias, cursos de post grado o del idioma chino mandarín. Asimismo, se calcula que en los últimos 5 años más de 310 paraguayos realizaron estudios de especialización en áreas técnicas, científicas o culturales.
“Hasta la fecha se han firmado más de 70 acuerdos y declaraciones internacionales siendo las más importantes la suscriptas el día de ayer donde la República de China (Taiwán) otorga al Paraguay la exoneración de aranceles de más de 50 productos, eleva la cuota de venta de carne paraguaya y se establece el sistema de exoneración de visas tanto para paraguayos al ingresar a Taiwán como de Taiwaneses para ingresar a nuestro territorio”, puntualizó
“Para culminar quisiera recordar al Maestro oriental Buda quien señalara: ´Lo verdadero es aquello que produce resultado´. Nuestras relaciones con la República China Taiwán han sido productivas y muy fecundas en estos 60 años, lo cual ha unido a dos países que distantes en el mapa geográfico pero que se hallan hermanados por el sentimiento mutuo de búsqueda del progreso, unión y bienestar de ambos pueblos”, apunto finalmente el Embajador Carlos Fleitas.